martes, 30 de diciembre de 2014

Helado de Mistela y Sorbete de Earl Grey

Tras tanto tiempo si asomarme por el blog, vengo con dos recetas de helado que veo idóneas para estas fiestas. Ya sé que casi no llego, pero más vale tarde que nunca, mañana todavía es Nochevieja y tenéis las 24h que necesitáis para enfriar la heladera así que... si os atraen no dudéis en prepararlas porque ambas gustaron muchísimo en casa este verano. Es más, el primero de ellos ni tan solo la necesita. Cualquiera puede prepararlo en casa con o sin heladera. 

El helado de mistela se basa en una receta de helado que lleva vino Marsala y que he extraído del libro Helados. Un placer para el paladar. de Susan Tee y editado por Parragon. Fue, al igual que el libro de pasta de esta receta, un pequeño tesoro que me encontré entre las ofertas de una de las librerías de Valencia y de donde han salido ya algunos helados buenísimos. Se trata de un helado muy cremoso y contundente, con el sabor inconfundible de este vino dulce y que puede sustituir el habitual chupito de Mistela en la sobremesa navideña, por ejemplo.

El sorbete es mucho más ligero que el helado de Mistela, por lo que es perfecto para finalizar una comida copiosa y escaparnos del típico sorbete de limón. Sobre todo si os gusta el té tanto como a mí. 

Si preparamos uno, podemos elaborar el otro con lo que nos sobre de los huevos. En mi caso, al sobrar claras y apetecerme un helado fresquito decidí preparar el sorbete, cambiando también el tipo de té y adaptándolo a mis gustos. Es un sorbete ligerísimo, lleno de sabor, donde el zumo de limón del almíbar potencia los toques cítricos que el Earl Grey tiene ya de por sí. 

Así que sin entretenerme más, y a pesar del frío que hace hoy por tierras valencianas, os cuento ya cómo prepararlos. 





HELADO DE MISTELA

INGREDIENTES ( para 6 raciones aproximadamente):

  • 4 yemas de huevo
  • 100gr de azúcar extrafino
  • 100 ml de mistela (o moscatel)
  • 200 ml de nata para montar. 

La ELABORACIÓN paso a paso:

1. Batir las yemas con el azúcar y cuando hayan espesado y aclarado su color, incorporamos a cucharadas y sin dejar de remover, la mistela hasta que esté todo integrado. 
2. Poner el cuenco en el que hemos batido las yemas al baño maría (sobre una cacerola con agua hirviendo a fuego lento) y calentar la mezcla sin dejar de batir. Estará listo cuando haya doblado el volumen (con este proceso lo que se consigue es cocer el huevo).
3. Retirar del fuego y poner el cuenco sobre otro cuenco o recipiente con agua fría, y seguir removiendo, hasta que quede todo bien mezclado y haya enfriado. 
4. Mientras realizamos el paso anterior podemos poner a montar la nata, que una vez firme incorporremos con movimientos envolventes a la crema de licor y huevo. 
5. Congelamos directamente sin tapar 2 o 3 horas hasta que solidifique. Queda tan cremoso que no resulta necesario utilizar la heladera. 


En la heladera se ve lo espumoso y suave que queda.


SORBETE DE EARL GREY

INGREDIENTES  (para 6 raciones, cunde más que el anterior):
  • 175 g de azúcar (personalmente lo rebajaría a 150g, aunque muy refrescante, lo encuentro demasiado dulce, pero si os gustan las cosas dulces muy dulces, adelante con los 175g)
  • 850 ml de agua
  • 2 bolsitas de té Earl Grey.
  • 2 cucharadas de zumo de limón. 
  • 2 claras de huevo. 

La ELABORACIÓN paso a paso:

1.  Calentar el azúcar con 600ml de agua a fuego lento. Remover hasta que se disuelva el azúcar. Llevar a ebullición y dejarlo hervir 10 minutos. Debe tener una consistencia almibarada y no haber cogido color. 
2. Dejamos reposar el almíbar durante al  menos una hora. 
3. Infusionar las bolsitas u hojas de té (en el caso de emplearlas) con el resto del agua. Debe quedar una infusión "fuerte". 
4. Mezclar el té y el zumo de limón al almíbar hasta que quede bien integrado. 
5. Añadir la mezcla anterior a la heladera. Cuando empiece a helarse, batimos las claras a punto de nieve y las incorporamos poco a poco a la máquina. Aunque no lo parezca, la mezcla acabará siendo uniforme, suave y esponjosa .

¡Feliz año nuevo! Espero poder volver por aquí más a menudo...

Caleidoscópica.